Es sorprendente cómo alimentos tan sencillos y naturales pueden constituirse como fuentes tan importantes de nutrientes, proteínas, vitaminas y minerales que tanto requieren nuestros organismos.
Esto lo encontramos, definitivamente, en las nueces que a veces consumimos como un simple hábito, a través de un tentempié o como un aperitivo antes de las comidas, pero que, sin saberlo, estamos frente a un alimento con múltiples propiedades que debemos aprovechar
Estos frutos secos son considerados como alimentos altamente energéticos y son recomendados en la mayor parte de las dietas o regímenes alimenticios, más aún cuando día a día se descubren nuevas y fantásticas propiedades beneficiosas para la salud.
Durante los procesos de eliminación de peso, se ha comprobado últimamente que la nuez hace más sencilla y efectiva la dieta, lo que ha llevado a que sean muy recomendadas por los endocrinólogos y especialistas en pérdidas de peso.
Se han comprobado también grandes beneficios en el consumo de las nueces sobre todo para aquellos que desean cuidar su corazón, pues estos elementos son ricos en grasas poliinsaturadas y en Omega 3, además que se ha demostrado que este contenido es el causante del éxito en las dietas, pues el organismo las utiliza adecuadamente en la síntesis de moléculas en los procesos inflamatorios.
Otras de las interesantes propiedades que podemos destacar en las nueces es que en ellas se pueden encontrar grandes concentraciones de antioxidantes que de ninguna manera se podrían hallar en otros alimentos y que van a ser de enorme ayuda para anular el efecto de los radicales libres que llevan a la degeneración celular, la ateroesclerosis, las tumoraciones y el envejecimiento prematuro, entre otros males.
Licor de nuecesYa se acerca el día de San Juan y esta receta la tenemos que hacer
por que luego para navidad está muy Rico este licor de Nueces.
Ingredientes:
9 Nueces verdes por cada litro de vino,
vino tinto,
azúcar,
cazalla.
Preparación:
Este es un vino macerado con nueces verdes, que por su alto contenido en yodo, va muy bien para estimular el apetito, además de que entra muy bien y con un contenido en alcohol bastante decente.
La receta es la siguiente: Se ponen a macerar nueve nueces verdes, partidas a trozos, por cada litro de vino que se quiere preparar. Según costumbres ancestrales, las nueces tienen que cogerse la noche de San Juan
Se tiene macerando el vino durante cuarenta días al cabo de los cuales, se retiran los restos de las nueces y se añade un Kg. de azúcar por cada cuatro litros de vino y un litro de cazalla, también por cada cuatro litros de vino. El azúcar debe disolverse adecuadamente y antes de verter el cazalla, ya que de lo contrario la disolución es muy difícil debido al alto contenido en alcohol del cazalla.
Una vez terminada la operación, se puede embotellar, pero colando la mezcla obtenida, ya que la nueces disueltas dejan un poso que afea un poco el producto. Se suele abrir para navidad para degustar este rico licor,
La cazalla es un licor fuerte parecido al aguardiente Por cada litro de vino harán falta 9 nueces, que según la tradición han de cogerse la noche de San Juan (aunque eso solo es recomendable en años de primaveras muy frías, o en zonas de montaña; de lo contrario, para esa fecha están ya demasiado duras para trocear. Las nueces se trocean si se puede en porciones menudas y se dejan macerar en el vino durante 40 días, conviene hacerlo en tarros de cristal o vasijas cerámicas tradicionales, guardándolas en un rincón seco y oscuro.
resultante se embotella y se deja reposar, de nuevo en sitio seco y oscuro, durante al menos 3 meses o sea, que estará perfecto para degustar hacia Navidad.
En el proceso es importante observar cada pocos días el vino durante la maceración, eliminando los trozos de nueces que queden flotando, si son trozos gruesos, pueden fragmentarse en otros más pequeños, que normalmente se hundirán. Si se dejan trozos flotando o no se trocean las nueces, se corre el riesgo -sobre todo si la nuez está aún demasiado verde- de que se produzca la fermentación del almidón del fruto, dando lugar a acetona se notará enseguida por el olor a laca de uñas, obligando a tirarlo.